En esta oportunidad quiero hablar como ciudadano, no como dirigente político, para dejar claramente establecido que nunca he sido ni seré un abstencionista electoral pasivo, por el contrario, desde 1978, proceso electoral en que voté por vez primera, nunca he dejado de hacerlo, ni siquiera hice mutis en las parlamentarias del 2005 por no estar convencido, en aquella oportunidad, de cuan efectiva sería la abstención, cuyos resultados son harto conocidos actualmente.